Grissom y Doofy

Dedicado a dos pequeñitos inocentes que se fueron siendo unos bebés.

Me ha costado tanto tiempo escribir estas palabra, quizás porque todavia me cuesta asimilarlo. Perdoname por no haberte dedicado antes el homenaje que te merecias, pero es que eras tan chiquitin que me causa dolor el pensar en ti...

La primera vez que te vi eras como una hormiguita, fuiste creciendo pero tu hermana siempre te superaba. Aun asi estabas precioso, alegre y aparentemente sano. Luego empezaste a decaer, después de casi 1 mes en casa cuando ya te queriamos demasiado.

Demasiado para dejarte marchar en el momento en que el vete nos comunico que no habia practicamente esperanzas (aquel dia de abril que tambien era doloroso en otro sentido pues debia ser el cumple de otra que se marchó el año pasado, mi preciosa Tinita)...

Tu corazon literalmente no te cabia en el pecho... pero no te imaginaba muerto, quizás debí hacerlo y no lo hice por crearme falsas ilusiones, pero al menos te fuiste en casa, acompañado, ronroneando en mis brazos sin querer separarte un milimetro de mi, maullandome si te dejaba en tu camita, eran los ultimos minutos de tu vida y no parabas de ronronear.

He de reconocer que fue mas rapido y menos doloroso de lo que esperaba, pero tambien he de reconocer que tenia alguna esperanza de que no pasara, de que te salvaras.
Me imaginaba lo precioso que serias de mayor, pero volví a revivir aquello que hace 5 años tanto me dolió, cuando Soujiro otro de la raza "Grissom" como tú, se marchó, este ya con 2 años y pico, por una enfermedad del corazon... y recuerdo que él esa noche solo queria estar acompañado y ronronear...

No queda consuelo ni casi buenos recuerdos cuando un ser tan chiquitin como tu se va, tu vida fue tan corta a pesar de que fuiste un campeon. Y a pesar de la brevedad te quisimos mucho, eras el protegido de todos... pero tu corazón era demasiado grande para este maldito mundo.

Un recuerdito para "nuestro" gatito chico, porque es un poquito de todas. Eras tan pequeño, que no pudiste resistir. Te encontró mi hermana solito, metido en un bidon, que estaba lleno de ceniza, en Madrid, y te cuidó lo mejor que pudo. Luego te fuiste con Sara, porque mi hermana no podia cuidarte todo lo que necesitabas. Entre todas te ibamos a buscar una casita donde alguién te diera todo ese cariño que no tuviste, pero no pudo ser. Aunque nunca te irás de nuestros corazones ni de nuestro recuerdo. Lo único que me consuela, es que te has ido en una casa donde te han dado calorcito, comida y todo el cariño que han podido, He llorado al enterarme y mi hermana más todavia, pero nunca te olvidaremos chiquitín!